Mis clases son prácticas y apenas hago ejercicios por escrito.



Sí tengo ejercicios preparados para hacer fuera de clase; es trabajo personal del alumno.

 

 

Si los alumnos no han estudiado nunca el idioma, vamos aprendiendo vocabulario y gramática a la vez que vamos practicando. En este caso, una explicación por escrito es necesaria, pero pasamos a usarlo rápidamente.

Si los alumnos sí lo han estudiado antes, vamos consolidando lo que, normalmente, ya han estudiado, corrigiendo los errores y aclarando las dudas que suele haber, además de continuar avanzando, por supuesto. En este caso, las explicaciones por escrito no son tan necesarias; la teoría suele saberse mejor que lo que la práctica demuestra.

 

La gramática es fundamental para expresarse con corrección, pero es mucho más fácil de asimilar si se practica a la vez.

 

Es preferible manejar pocas estructuras correctamente, con confianza y fluidez, que tener errores y dudas en muchas más.

Los ejercicios son variados, por lo que las clases siempre se pasan rápido, y van encaminados a la mejora de la confianza, la fluidez y la corrección al hablar. Vemos distintos trucos para facilitar la pronunciación, muchas veces lo complicamos nosotros mismos, y usamos las mismas estructuras de formas distintas para dominarlas.

Organización de las clases

Siempre hago un repaso desde el principio, para saber el nivel de cada alumno, y voy avanzando según el alumno y yo veamos que se domina lo preguntado.

Las clases son de cinco personas como máximo, y pongo el máximo cuidado en que el nivel sea igual o muy parecido. Esto es fundamental para un buen aprovechamiento de las clases.

 

¿Os ha convencido y queréis que sea vuestro profesor?

Aqui podéis poneros en contacto conmigo.

 


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